DOMINGA.– Acostumbrada al caos, a la Ciudad de México la atraviesan las marchas, los bloqueos y un sin cesar de cláxones de una guerra urbana. Hierve el humo. Aunque desde hace algunos años la metrópoli cohabita con menos niveles de violencia que la mayoría de los rincones del país, hay días –contados, espaciados, inolvidables– en los que no es el caos lo que reina, sino el miedo. Días en que la violencia no sólo desborda a los barrios de la ciudad ilustre e intocable, sino que cruza sus avenidas principales –Periférico Sur, Paseo de la Reforma, Tlalpan–, redacciones periodísticas y palacios del poder.Los chilangos somos tema en redes sociales bajo el tópico de homicidios de tiempo atrás, a pesar de que las dos últimas administraciones capitalinas han presumido resultados en la materia. La jefa de gobierno Clara Brugada Molina y el secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez Camacho, aseguran que los delitos de alto impacto han disminuido 66% en los últimos siete meses. Los homicidios dolosos han caído 49% y los asaltos en microbús se han desplomado 80%. Todo parecería ir bien.Claudia Sheinbaum Pardo y Omar García Harfuch destacaron en su momento haber hecho su parte: según un reporte de la organización Causa en Común, elaborado con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, los homicidios dolosos en la capital del país pasaron de 34 mil 662 en 2018 a 30 mil 568 en 2023.DOMINGA hace un recorrido a través de los atentados y asesinatos que más han estremecido a la capital en los últimos años y que la han detenido en la conmoción. Desde el ataque a García Harfuch, la balacera en Topilejo, el feminicidio de Íngrid Escamilla, el asesinato a Paco Stanley, hasta el reciente latigazo contra la vida de Ximena Guzmán y José Muñoz, ocurrido en Calzada de Tlalpan. Los colaboradores cercanos al círculo de Brugada nos recuerdan que todos somos vulnerables. 1. El mensaje a Omar García Harfuch (26 de junio de 2020)Paseo de la Reforma, Lomas de ChapultepecEl entonces secretario de Seguridad Ciudadana viajaba en una camioneta blindada cuando un comando de más de 20 sicarios lo emboscó al amanecer sobre la boyante avenida Paseo de la Reforma. Aquello fue una escena de guerra: se registraron 414 casquillos percutidos, rifles Barrett, granadas, civiles heridos.El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) asumió la autoría del ataque. García Harfuch sobrevivió con tres impactos de bala. Murieron dos escoltas y una mujer que vendía comida en la zona. Quizá por primera vez, la élite política de la Ciudad de México se sintió vulnerable. “Fue una declaración de guerra del narco al Estado desde el centro neurálgico del país”, dijo entonces un general de división en retiro.2. El asesinato de Ximena Guzmán y José Muñoz (20 de mayo de 2025)Calzada de Tlalpan, frente a estación del Metro XolaEran la secretaria particular y el coordinador de asesores de la jefa de Gobierno Clara Brugada. Sus más cercanos, sus queridos. Fueron asesinados a tiros, en plena hora pico. Poco después de las siete de la mañana, a casi nada de que comenzara la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, muchos conocieron el atentado casi en tiempo real, durante ‘La Mañanera’, uno de los espacios más vistos por la comunidad política del país.Las imágenes lo registraron: García Harfuch viendo el celular en televisión abierta, compartiendo información con el jefe de jefes de los militares. Todo el gabinete de seguridad reunido en Palacio Nacional, la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, al micrófono; la vocera del gobierno capitalino captando el mensaje y en un instante haciendo una ficha informativa. Sheinbaum empezaba a saberlo frente a millones de personas que seguían la transmisión. El hijo pródigo del combate al crimen organizado tratando de ocultarse detrás de una mampara para enterarse de todo el desastre.La serie de fotografías del gran Ariel Ojeda lo dicen todo. Son testimonio del momento más tenebroso de nuestros días. Ni Donald Trump asusta tanto a los chilangos como que vengan los cárteles a tocar a nuestra puerta. La derecha y sus secundadores gritarán “¡narcoterrorismo!” porque quieren que alguien haga su trabajo, les ponga ideas, desean que la mano gringa toque las pieles de los mexicanos; los demás haremos preguntas, indagaremos, investigaremos. Y sabremos que no queremos más locuras.Ximena Guzmán y José Muñoz, los caídos, los asesinados, son ya símbolo de una guerra despiadada. Luchadores políticos, cómplices de sus sueños. Ella era socióloga, eficiente, con maestría en París; él era experto en poner conceptos en las orejas de los que pueden, izquierdista de corazón, entregado a transformar el país. ¿Víctimas colaterales de poderes informales enfurecidos?“El medio es el mensaje”, diría el candiense Marshall McLuhan, papa grande de las teorías de comunicación. En este caso “La hora es el mensaje”. El doble crimen ocurrió a las siete y cacho, cuando estábamos a un tris de escuchar ‘La Mañanera’, la conferencia de la presidenta que da mensajes políticos. Los patos cojos, cojean; las abejas reinas, no asienten. La ejecución tuvo resonancia: un mensaje contra el gabinete de seguridad capitalino. La jefa de Gobierno decretó luto y reforzó la vigilancia. El gabinete de seguridad nacional también tomó nota. ¿Qué nos están queriendo decir los “bad hombres” que los ejecutaron a mansalva?3. Los disparos contra Ciro Gómez Leyva (15 de diciembre de 2022)Crucero de Juventino Rosas y Tecoyotitla, Alcaldía Benito JuárezEl periodista salía de su noticiero nocturno en Imagen Televisión cuando una moto y un automóvil lo interceptaron a unos metros de su domicilio en la alcaldía Benito Juárez. Le dispararon en movimiento. Se salvó por el blindaje de su camioneta. El ataque desató una ola de solidaridad. El entonces presidente Andrés Manuel López Obrador, con quien Ciro mantenía una relación tensa, condenó el hecho. Hasta hoy, no hay una versión oficial concluyente sobre los autores intelectuales.4. Balacera en Topilejo (12 de julio de 2022)San Miguel Topilejo, TlalpanElementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana enfrentaron a una célula de Los Chapitos que operaba en una casa de seguridad de San Miguel Topilejo, pueblo originario en la alcaldía de Tlalpan. Hubo ocho detenidos, arsenal decomisado y un claro mensaje: el Cártel de Sinaloa ya tenía operaciones firmes en la capital. Lo más inquietante: entre los capturados había hombres con entrenamiento militar, armados con fusiles AK-47, ametralladora Barrett y granadas.5. El asesinato de Norberto Ronquillo (junio de 2019)Terreno baldío en Avenida del Campo, Santa Cruz Acalpixca, XochimilcoTenía 22 años y estudiaba mercadotecnia en la Universidad del Pedregal. Lo secuestraron al salir de clases y lo mataron pese a que su familia pagó el rescate. Su cuerpo apareció maniatado y con signos de tortura. El caso provocó marchas, debates sobre seguridad para jóvenes y evidenció que el secuestro exprés seguía siendo parte del tejido criminal en el corazón político del país.6. El feminicidio de Íngrid Escamilla (febrero de 2020)Domicilio de la calle Tamagno, Colonia Vallejo, Gustavo A. MaderoNo fue un atentado político ni un crimen de alto perfil, pero sí desató una tormenta. Íngrid, una joven de 25 años, fue asesinada por su pareja, un individuo que se hallaba alcoholizado. Un policía, que después fue procesado, filtró las fotos del cadáver desollado, lo cual desató la indignación nacional. Activistas, medios, organizaciones civiles y ciudadanos salieron a las calles movidos por esa irritación.7. La ejecución de los “niños sicarios” (2021 y 2023)Zona centro y orienteEn años recientes, cuerpos de jóvenes de entre 13 y 17 años han sido hallados con mensajes firmados por La Unión Tepito y Fuerza Anti-Unión. Son sicarios reclutados desde las escuelas, utilizados como halcones o cobradores. Estos casos han estremecido por su crudeza y por la normalización de la violencia entre adolescentes. En 2023, un niño de 14 años fue ejecutado por “pasarse de bando” entre las facciones del narcomenudeo.8. Atentado contra Diana Sánchez Barrios (17 de octubre de 2024)Calle de Motolinia, Centro HistóricoLa lideresa de comerciantes y diputada local fue víctima de un ataque armado en el corazón del Centro Histórico. El atentado dejó un acompañante muerto y a Sánchez Barrios gravemente herida. Sobrevivió. Las autoridades detuvieron a los presuntos responsables, quienes fueron captados por cámaras de seguridad.9. Asesinato en plaza Miyana (4 de diciembre de 2024)Colonia Granada, PolancoJesús Pérez Alvear, conocido promotor musical vinculado al CJNG y testigo colaborador de autoridades de Estado Unidos, fue asesinado a tiros mientras comía en un restaurante dentro del centro comercial Miyana, en el lujoso barrio Granada, cerca de Polanco. El ataque, perpetrado por dos hombres armados, fue captado en video y generó una alerta de seguridad por parte de la embajada estadounidense.10. Cae Manuel Beltrán Quintero (12 de septiembre de 2024)Crucero de Oliver Goldsmith con Charles Dickens, PolancoEl empresario Manuel Beltrán Quintero, sobrino del capo Rafael Caro Quintero, fue asesinado en Polanco. Aunque los detalles del caso son limitados, su muerte ha sido relacionada con disputas entre grupos criminales que operan en la zona.11. Homicidio en restaurante La Polar (8 de enero de 2023)Guillermo Prieto, San RafaelAntonio Monroy fue golpeado hasta la muerte por empleados del restaurante La Polar tras una discusión por el cobro de propina. El caso, captado en video y difundido en redes sociales, provocó indignación pública y llevó a la clausura temporal del establecimiento. Las versiones sobre su relación con el crimen organizado no han sido aclaradas.12. Artz Pedregal: un ajuste de cuentas internacional (24 de julio de 2019)Restaurante Hunan, Álvaro ObregónAlrededor de las 17:15 horas, una mujer vestida de negro, elegante, como cualquier comensal del restaurante Hunan en el centro comercial Artz Pedregal, desenfundó un arma y disparó sin titubeo contra dos hombres que acababan de sentarse a la mesa. En segundos, la escena se convirtió en un caos: gritos, vidrios rotos, gente escondiéndose entre las jardineras de diseño de uno de los centros comerciales más exclusivos del sur de la ciudad.Las víctimas fueron los ciudadanos israelíes Azulay Alon, de 41 años, y Benyamín Yeshuaron, de 46. Según las investigaciones posteriores de la Fiscalía capitalina y de agencias internacionales, los protagonistas estaban ligados al crimen organizado. La agresora, Vanesa Ballar, específicamente, formaba parte de las estructuras financieras del CJNG.13. Ecos del pasado: el asesinato de Paco Stanley (7 de junio de 1999)Restaurante El Charco de las Ranas, Periférico SurEra la mañana del 7 de junio de 1999 cuando Paco Stanley, una de las figuras más populares de la televisión mexicana, fue asesinado a balazos tras desayunar con sus colegas Mario Bezares y Jorge Gil. El conductor salía del restaurante El Charco de las Ranas cuando fue emboscado por al menos tres tiradores que dispararon con armas largas desde un vehículo. Stanley recibió cuatro impactos de bala. Murió dentro de su camioneta Suburban, frente a decenas de testigos y una ciudad paralizada por la noticia. El crimen provocó conmoción nacional: era la primera vez que un personaje tan mediático era asesinado en circunstancias que, desde el inicio, apuntaban a vínculos con el crimen organizado.El gobierno de la Ciudad de México, entonces encabezado por Rosario Robles, inició una investigación marcada por irregularidades, filtraciones y presiones políticas. La Procuraduría local detuvo a Mario Bezares y Paola Durante, asistente del programa, bajo acusaciones que años después serían desmontadas. El caso terminó siendo uno de los más polémicos y cuestionados en la historia reciente del sistema de justicia mexicano.El asesinato de Stanley se convirtió en un parteaguas: marcó el fin de la mirada de inocencia sobre la televisión mexicana y el inicio de una era donde las celebridades, el poder y el crimen parecían tener líneas cada vez más difusas.La ciudad que resiste al crimenEstos atentados no son sólo números en reportes de seguridad. Son grietas en las vulnerabilidades de la seguridad en la capital palpitante del país. Son episodios que recuerdan –con sangre, fuego y ruido de ráfagas– que ni los secretarios, ni los políticos, ni los periodistas, ni los jóvenes están a salvo. Las muchachas que denuncian abusos tampoco. Crímenes que marcan a una metrópoli que, sin embargo, parecía haber dejado atrás asesinatos que igual la sacudieron, como el del magistrado capitalino Abraham Antonio Polo Uscanga (1995), el del diputado José Francisco Ruiz Massieu (1994) o el del periodista Manuel Buendía (1984). Aquellos días que estremecieron al país en el pasado, de vez en vez, regresan entre nosotros. Ahora se respiran esos humos.La capital se sacude, se blinda, investiga… y espera que los olores a impunidad se esfumen pronto.Edición GSC